Para ampliar las estrategias asociativas de enseñanza–aprendizaje, las escuelas técnicas en Río Negro cuentan con un socio clave: el INTA. ¿El objetivo? contar con herramientas que desarrollen huertas agroecológicas en los centros educativos, y su impacto inmediato en la soberanía alimentaria de las comunidades, a través de las llamadas “prácticas profesionalizantes” para los estudiantes.